Va de gastos
¿Qué culpa tiene el tomate, de estar metido en la lata….?. Eso dice un refrán popular y, ¿qué culpa tengo yo de ser bajito?.
Viene esto a cuento, ya que el viernes por la tarde fui a una tienda de ésas que arreglan ropa. Está claro que uno no sabe coser. Total arreglar unos bajos de 2 pares de pantalones: 92 €.
¡ Menuda sangría llevo nada más iniciar el mes, entre el coche y los pantalones ¡. Quizás hubiera valido la pena no salir a la calle; me habría ahorrado los 85 € de la batería y los 92 € de los pantalones…, claro que eso es decir por decir, porque tampoco me hubiera gustado estar encerrado en casa todos ésos días ni tampoco hubiera podido evitar ésos gastos ocasionados.
El ir a ésa tienda, me dejó asombrado en algunas cosas: Una la actividad frenética que había. Otra hablar con la señora encargada de la tienda de arreglo de ropas. Resulta que le comenté que yo pensaba que todo el mundo se probaba una prenda y ¡zasss.., perfecta, le queda perfecta ¡ y no es así.
Para mi asombro, la señora encargada me comenta que va muchísima gente a la tienda y, gente con buena percha y, en consecuencia no a todo el mundo le queda bien la ropa cuando se la pone por primera vez. Bueno eso es un consuelo para mí.
En fin alucino aún más.
Viene esto a cuento, ya que el viernes por la tarde fui a una tienda de ésas que arreglan ropa. Está claro que uno no sabe coser. Total arreglar unos bajos de 2 pares de pantalones: 92 €.
¡ Menuda sangría llevo nada más iniciar el mes, entre el coche y los pantalones ¡. Quizás hubiera valido la pena no salir a la calle; me habría ahorrado los 85 € de la batería y los 92 € de los pantalones…, claro que eso es decir por decir, porque tampoco me hubiera gustado estar encerrado en casa todos ésos días ni tampoco hubiera podido evitar ésos gastos ocasionados.
El ir a ésa tienda, me dejó asombrado en algunas cosas: Una la actividad frenética que había. Otra hablar con la señora encargada de la tienda de arreglo de ropas. Resulta que le comenté que yo pensaba que todo el mundo se probaba una prenda y ¡zasss.., perfecta, le queda perfecta ¡ y no es así.
Para mi asombro, la señora encargada me comenta que va muchísima gente a la tienda y, gente con buena percha y, en consecuencia no a todo el mundo le queda bien la ropa cuando se la pone por primera vez. Bueno eso es un consuelo para mí.
En fin alucino aún más.
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